Las ventanas se definen como un elemento esencial de nuestros espacios en el hogar. Es gracias a ellas que tenemos la oportunidad de percibir todo a nuestro alrededor. También recibimos la luz solar necesaria para darle un toque de personalidad al ambiente que nos rodea. Por lo tanto, a continuación, queremos enseñarte la forma correcta de escoger entre cortinas o persianas.
Tanto las cortinas como las persianas son capaces de aportar grandes beneficios para nuestra vivienda. Por ejemplo, nos ayudan a asegurar la privacidad al interior de la casa, sirven como barrera en contra de la luz externa y de la temperatura. Además de ello, pueden sumar puntos a la personalidad de nuestro espacio. Sin embargo, de ambos casos, ¿Cuál es la mejor opción?
Cortinas: ¿Qué son y cuándo usarlas?
Se trata de la opción más popular. Las cortinas suelen venir en una amplia variedad de largos, anchos, telas, colores y patrones. En cualquier caso, son bastante prácticas y versátiles, capaces de adaptarse tanto a los sitios más formales, como las oficinas, y a los sitios más sencillos, como las habitaciones infantiles.
Las cortinas casi siempre son hechas con telas livianas, de manera que pueden contar con una o varias capas. También suelen tener aperturas horizontales y han sido diseñadas para darle ese toque especial a las ventanas. A diferencia de una persiana, las cortinas pueden ser mucho más llamativas.
Su mayor ventaja es la versatilidad y capacidad de adaptarse a cualquier habitación. Por ejemplo, puedes añadir algunas cortinas cortas y livianas en la cocina, mientras que se aplican cortinas black out para las habitaciones. En otros casos, pueden irradiar calidez, algo muy práctico para las casas y cabañas que se encuentran al aire libre.
Una cortina de calidad debe ser capaz de equilibrar la funcionalidad junto con la estética, aportando una privacidad mayor y bloquear la luz. Muchas veces, en los dormitorios se mezclan las persianas con las cortinas para que el dormitorio sea lo más oscuro posible. Cabe destacar que puedes jugar siempre con los colores, toques de contraste, y mucho más.
Persianas: ¿Qué son y cuándo usarlas?
En este caso, las persianas se constituyen como la opción ideal para ti en caso de que quieras una mezcla perfecta entre comodidad y estilo. Aunque es cierto que no son tan atractivas como las cortinas, sí presentan una serie de ventajas que las convierten en opciones ideales. La iluminación es el punto más fuerte de las persianas, pues gracias a ellas, puedes tener un control absoluto de luz.
Las persianas, a diferencia de las cortinas, destacan por ser bastante sólidas. Incluso, han sido fabricadas en materiales distintos como listones hechos de madera, aluminio, poliéster y plástico. Por otro lado, las persianas tienen un sistema de cierre con abertura vertical.
Una de las mayores ventajas de las persianas es que son muy prácticas, son capaces de iluminar toda una sala, y al mismo tiempo, cerrarse con la intención de aplicar privacidad. Asimismo, se necesita de un escaso mantenimiento y pocos cuidados para mantenerlas. En caso de que compres una, podrás disfrutar de ella por muchos años. Generalmente, su precio es más económica que las cortinas, pues no se necesita de tanta tela para producirlas.
Unas buenas persianas pueden llegar a ser frescas y elegantes, es posible mezclarse con la habitación y son útiles para quien le encanta lo práctico y lo cómodo. Un ejemplo de ello sería usarlas tanto en las oficinas como en los hogares, pero más que todo en las habitaciones principales.
¿Cómo elegir entre cortinas y persianas?
Debes recordar que, en todo caso, la decisión final la tendrás tú, y esta dependerá de muchos elementos. Por ejemplo, algunos de ellos son el presupuesto, el tamaño que tenga la ventana y el tipo de habitación. De cualquier manera, siempre habrá aspectos positivos y aspectos negativos. Pero después de hacer una valoración de estas tres cosas, puedes tomar la mejor decisión.
En ocasiones, es probable que se trate de un espacio pequeño, con un ambiente minimalista y hasta un poco cerrado. Si este es tu caso, la persiana puede ser mejor opción. Sin embargo, si se trata de una ventana grande, que va de techo a piso o de muro a muro, en una casa propia, la cortina puede ser la mejor opción. Por consiguiente, si cuentas con decoraciones más tropicales o la ventana permite mirar a un espacio público, puedes recurrir a una persiana de madera que favorezca la senda como celosía.
Finalmente, la mejor opción será la que tú consideres apropiada para tu espacio, que se adecue a tus planes y a tu presupuesto. Esperamos que todos estos datos puedan ayudarte a escoger cortinas o persianas, de manera que puedas combinarlas a la perfección debido a la estética y comodidad que esto puede aportar.
